Ayer, colocando unos libros en la estantería, tropecé con uno de poesía de Laura Campmany que compré hace algunos años cuyo título es el mismo con el que he querido bautizar este post: Travesía del olvido, libro con el que la autora ganó el Premio de poesía Hiperión en su XIII convocatoria y del cual el jurado destacó "su coherencia y unidad, su lograda simbiosis entre vida y literatura, la autenticidad y gallardía de su voz poética y el notable dominio formal de su expresión, que combina con acierto estrofas y ritmos clásicos y contemporáneos".
EL CAMINO es el título del primer poema del libro, del cual guardo un buen recuerdo desde la primera vez que lo leí y dice así:
EL CAMINO
Mi vida tiene forma de camino,
y un fondo de verdad en la maleta,
y una ilusión, ridícula y secreta,
donde confluyen Dios y mi destino.
Mi vida tiene ya sabor a vino,
y a noches de relente y escopeta,
y a pan desmenuzado en la cuneta,
y a humilde vocación de peregrino.
Mi vida es algo tonto que dormita
bajo la higuera azul de la esperanza
mientras el tiempo, inexorable, avanza.
Mi vida es un clamor que resucita
cuando siente que existe, cuando alcanza
un poco del amor que necesita.
Mi vida tiene forma de camino,
y un fondo de verdad en la maleta,
y una ilusión, ridícula y secreta,
donde confluyen Dios y mi destino.
Mi vida tiene ya sabor a vino,
y a noches de relente y escopeta,
y a pan desmenuzado en la cuneta,
y a humilde vocación de peregrino.
Mi vida es algo tonto que dormita
bajo la higuera azul de la esperanza
mientras el tiempo, inexorable, avanza.
Mi vida es un clamor que resucita
cuando siente que existe, cuando alcanza
un poco del amor que necesita.
12 comentarios:
Esa estrofa final es un poema en sí misma. Todos necesitamos ese "clamor" para seguir viviendo.
Magnífico poema, amiga Mucipa.
Un fuerte abrazote.
Un placer andar estos caminos contigo y de mano de Laura Campmany. Enhorabuena a la poetisa y gracias por darla a conocer.
ANRO:
Estoy de acuerdo contigo: sintiendo que existimos y con una buena dosis de amor es más fácil querer seguir viviendo.
Un abrazote muy muy fuerte
Marcos Callau:
El placer es mío al leer tu comentario. Éste es uno de mis poemas favoritos de Laura Campmany y no he dudado en dar a conocer a esta poetisa que escribe tan bien tanto con rima clásica como contemporánea.
Un abrazo
Al final siempre vamos en busca del amor ¿qué si no?
biquiños,
Aldabra
Aldabra:
Pues sí, con amor la vida tiene algo de sentido.
Biquiños
El camino me ha parecido un gran poema, seguro que el libro de Laura esta muy bien.
Boris:
Doy fe de la calidad del libro, al menos desde mi punto de vista. Laura Campmany tiene un estilo propio brillante y al mismo tiempo sencillo que a mí me parece muy interesante.
Cuando lees algo que te choca negativamente parece que el resto pierde importancia y a mi "higuera", "azul" y "esperanza" no me cuadran. De todas formas ya quisiera yo escribir así.
Pepe del Montgó:
Si no te da buena espina esa combinación de palabras es normal que el poema se te resista un poco. A mí es que me encanta la relación surrealista de palabras en algunas ocasiones y Laura Campmany suele mezclar la rima clásica con algunos recursos más contemporáneos.
Un abrazo.
Hola!!!
La foto del camino, me hace acordar esos lugares que visito, tan inesperados, sin saber que hay detras de esa curva, me encanta.....
Buena semana y un abrazo de oso.
Común:
Me gustó la foto porque a veces no sabemos qué nos vamos a encontrar a lo largo del camino al igual que no sabemos lo que encontraremos a lo largo de nuestra vida y el poema refleja el clamor por la vida y la existencia.
Un fuerte abrazote.
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